28 de noviembre de 2019

Con o sin hielo,
nunca fui ángel,
tampoco demonio.
Ansiaba la paz,
crecer y luchar.
Aprender cada día,
escuchar y frenar, 
pararme a pensar,
qué puedo mejorar.

Hasta cuándo..

Todavía espero,
tu coche aparcado,
cuando vuelvo.

Que te sientas mejor,
que un día,
un latido,
te haga querer,
un beso.

Que te acuerdes,
de todos los momentos,
los buenos.
Que sepas,
que los malos,
nos unieron.

Que aprendimos,
que quisimos,
que volvimos,
siempre,
a querernos.

Que nada es tan malo,
ni tan oscuro,
que no haga,
que al vernos.
volvamos a tocar el cielo.

27 de noviembre de 2019

¿Qué hizo el destino?

Tanto amor que no olvido.
tanta pena de no ser más,
de no tener,
de no sentir,
ya no hay hilo.

Decir adiós, para siempre,
no hay esperanza,
no hay motivo,
Duele tanto..
tanto vacío.

Ya no hay lugar,
ni he creído
que sea posible de nuevo,
un espacio unido,
que nos junte una vez más,
tu cuerpo con el mío.

No buscarás,
mi abrigo,
ya no hay latidos.
Ya no soy más,
tu amor,
idílico.

Y aunque quisiera pensarlo,
que miedo,
que frío.

¿Dónde se rompió el hilo?


Carta amiga .

Hace algún tiempo me miraron de una forma que nadie la había hecho antes, me hizo soñar y pensar en que el amor de verdad existe y yo también lo merezco; yo no quería dejar de creer en los límites y en los precios. Pero al final me enamoré tanto que perdí todos mis muros y miedos si estaba a mi lado.

Es lógico pensar que ahora esté destrozada, pero debo mantenerme fuerte y recordarme que yo no hice nada mal, que yo no puedo salvar a quien no se deja y que no puedo solucionar todos los problemas del mundo.No debo olvidar que yo no tengo el poder de estropearle la vida a nadie y menos por como soy.

Tengo que cambiar las cosas, mi vida, nuevos amigos, nuevas actividades.. y no olvidar que todavía merezco ser amada, que soy una bella persona y que...

Si el destino quiso jugar conmigo puedo aprender de ello.

Podríamos hablar de las ilusiones de que realmente el tiempo nos devolverá al mismo lugar.. pero, creo que no es sano vivir con esa ilusión. Debo aceptar la pérdida, pasar página. Él lo hará y tu también deberías. No puedes hacer que nadie te quiera, ni que siga a tu lado si decide irse para saber quien es.

Carta a mi alma.

¿Y ahora qué?

Parece que el cuento no termina donde se quedó, que los caminos cambian en solo un instante y que sin saber debes aprender a caminar de nuevo.

Hoy no será el día que veas que todo tenía un porqué, hoy tampoco será el día que guardes la ilusión de que todo fuera un mal sueño. Hoy va a ser el día en el que reconozcas que todo lo que sientes no se va a ir, que lo bonito perdura en el tiempo y en ti, pero que nadie más volverá a saberlo.

Hoy se mueren los latidos y se entierran los recuerdos para que solo tú los veas, como un tesoro de lo que pudo ser y no será, de lo que fuiste y podías ser, pero ya, que más da.

Guárdalo nena, guárdalo, ahora es solo tuyo.